A todo esto, un buen artículo de Relaño:
http://www.as.com/opinion/articulo/dudas-guardiola-mourinho/20120224dasdaiopi_3/TesUno de tantos amigos que uno tiene me reta en twitter: "¿Para cuándo un don Imprescindible se hace el interesante referido a Guardiola?". Y tiene sus razones, lo admito. Aunque hay diferencias: Guardiola no tiene contrato para el año que viene; Mourinho, sí. Guardiola suele renovar en febrero su contrato, que siempre firma de año en año, mientras que Mourinho vino, previo pago de traspaso, para cuatro años. Mourinho deslizó, hasta donde yo sé, su intención de marcharse a través de lo que hemos dado en llamar "su entorno". Guardiola duda sobre si renovar su contrato un año más o no.
Parece lo mismo, pero no es lo mismo. Es más: creo que el problema de Guardiola es más hacia dentro, mientras que el de Mourinho es más hacia fuera. Me explico: Guardiola no ve, o así me lo parece, a sus jugadores en el estado febril en que estaban no hace tanto, ese estado que le hace a uno ganador. De lo que sí sigue estando seguro es de la afinidad de eso que hemos venido en llamar entorno con su proyecto: la ciudad, los medios... A los jugadores les cuesta militar en la perfección que Guardiola pide, ese es el problema. Y no es un problema menor. Porque los que juegan son los jugadores.
En el Madrid es exactamente al revés. Los jugadores, con pequeñas salvedades (muy salvables), están ciegamente tras las instrucciones de Mourinho. El entorno, no tanto. El club sí. El club se desvive por él. Pero esa atmósfera que en Barcelona acaricia a Guardiola, en Madrid se le hace hostil a Mourinho, que se siente bisagra entre el club que fue y el que él pretende que sea. En el caso de Guardiola, el problema es su pulso para sostener al Barça en esos máximos en los que lo ha colocado. En el de Mourinho, es el de trasladar al Madrid a un espacio en el que nunca estuvo. Los dos sufren. Veremos.